LAS 5 ENSEÑANZAS DEL TANTRA QUE REVOLUCIONARON MI SEXUALIDAD

Muchas veces me preguntan ¿qué es el Tantra? Te cuento muy resumido: el Tantra es una vía espiritual, que a diferencia de otras vías espirituales o religiones, simplemente no niega el sexo como camino a la iluminación.

Entonces, ¿el Tantra va de sexo? Sí y no. Va mucho más allá de lo sexual, pero eso es lo que más nos ha llegado a Occidente porque es lo que más nos sorprende. No te pide que prometas celibato, que te hagas monje o que te desapegues del cuerpo para iluminarte, sino que te invita a vivirte desde el cuerpo y a aprender a mover la energía sexual en él.

Yo no te puedo contar lo que es el Tantra, se queda grande para ponerlo en palabras. Pero sí te cuento lo que he aprendido de mi experiencia en años de formaciones y talleres de sexualidad desde una visión tántrica.

1 – ESTAR EN MÍ, ESTAR PRESENTE, SENTIR-ME

Cuando tienes sexo es muy fácil perderte en el otro, en ocuparte de dar placer al otro, en preocuparte de lo que le gustará al otro, en preocuparte de lo que pensará de ti el otro, en hacerlo bien para el otro… ¿te suena? Hacer, hacer, hacer, siempre pendiente del otro, de afuera, y esperando que desde allí fuera te hagan cosas mágicas.

Pero y entonces, ¿dentro de ti quién hay? No hay nadie!! Es imposible sentir placer si no estás en el cuerpo, si estás en el otro o estás en la cabeza preocupada por lo que le gustará o dejará de gustar al otro. ¿Quién está disfrutando si aquí dentro no hay nadie?

El Tantra es una invitación a ESTAR, a SENTIR-TE, a estar dentro de ti. La clave es la respiración: respirar, respirar, respirar, ir hacia dentro, sentir la respiración en el cuerpo, habitar tu cuerpo. Y entonces estás PRESENTE en tu cuerpo, y entonces sí estás ahí para disfrutar del placer. Es dentro, no fuera donde está el placer. Es en ti, no en el otro.

2 – UNIR EL SEXO CON EL CORAZÓN

Y no me refiero al tipo de relación que tienes con la persona que estás, sino a amar el momento, amar lo que está ocurriendo, ponerle CORAZÓN. Muchas veces nuestros miedos de gustar, de ser abandonadas o rechazadas, de que nos puedan hacer daño, etc., hacen que nos relacionemos con el corazón protegido, con el corazón cerrado.

El Tantra invita a unir sexo y corazón, poner presencia y corazón en cada caricia, en cada instante. A veces no es fácil permanecer ahí, abrir el corazón se puede sentir muy vulnerable, pero hay magia al hacerlo.

3 – EL CUERPO COMO TEMPLO, HACER EL AMOR COMO ALGO SAGRADO

Mi cuerpo es un templo, el de él también. Tocarlo es un privilegio. Cuando se hace con DEVOCIÓN, y con corazón, la experiencia se vuelve una experiencia sagrada, y se siente como son dos almas uniéndose. Cuando eres tocada desde ese lugar, todo tu cuerpo se abre y se despierta.

No te estoy hablando de nada religioso, solamente de convertirlo en sagrado. El Tantra por ejemplo llama “Yoni” a la vagina, y “Lingam” al pene, son nombres que a mí me ayudan a sentir esa dimensión más sagrada.

4 – RELAJACIÓN

En la búsqueda de placer yo recuerdo buscar siempre más y más excitación, y por lo tanto más y más tensión. Cuando el cuerpo se tensiona tanto, en algún momento se descarga, y a esa descarga se la llama orgasmo, y sienta bien. Pero hay mucho más. Aquí la invitación es a aumentar la excitación desde la RELAJACIÓN del cuerpo, desde un lugar más profundo.

Puede parecerte contradictorio pero no lo es, la excitación sube de manera gradual, pero como no hay tensión puede seguir subiendo, sin necesidad de bajar en picado en una descarga. Y por lo tanto el placer crece y se expande mucho más allá.

5 – ENERGÍA Y CONCIENCIA

Somos energía. El Tantra no busca que tengas orgasmos, sino que te invita a mover la energía sexual a través de tu cuerpo, a dejarla fluir. Con la excitación se despierta la energía sexual, y la invitación es a mover esa energía. De hecho, con la intención puedes subir esa energía por todo el cuerpo y experimentar estados expandidos de conciencia. A través de tu cuerpo puedes experimentar cosas que yo hace unos años no podía ni imaginar. Pero sin ir tan lejos, solo tomar consciencia de la energía en tu cuerpo, aprender a moverla y a no reprimirla, es un juego maravilloso.

 

Daría para escribir muchos más posts, pero esto es lo que he sentido compartirte hoy sobre el Tantra, o lo que ahora tengo más presente de mis experiencias. Son invitaciones que apuntan a un lugar de placer muy verdadero.

Este post no lo publico en martes como las semanas anteriores. Tal como invita el Tantra a fluir con la energía, yo también voy fluyendo con los posts. Encontrando el equilibrio entre estar hacia afuera compartiendo contenido aquí y en redes sociales, sin olvidarme de estar hacia dentro conmigo misma.

6 comentarios

  1. Gracias por compartir y dar una mini explicación de manera sencilla, tenia dudas sobre qué es exactamente el Tantra y con el post me lo has aclarado. MErci

  2. Genial artículo. Muchas gracias por compartir. Acabo de descubrir tu web y estoy encantada. Me encantan todos los post y el resto de contenido. Enhorabuena por tu trabajo.

    1. Muchas gracias por dejarlo en un comentario y me alegro mucho de que encuentres información interesante. Seguiré creando más, un abrazo grande!

  3. Gracias Andrea por compartir una vez mas tus experiencias, tus conocimientos con tanto Amor y Bondad, eres estupenda y enhorabuena por tu trabajo y dedicación. Realmente estoy totalmente de acuerdo con estas aclaraciones que pones sobre el Tantra, en realidad es como deberia aprenderse y practicarse el acto que llamamos Hacer el Amor en pareja o con uno mismo. Gracias ANdrea, genial el BLog, no dejes de escribir! Eres de gran ayuda!

  4. Hola Andrea, hablando con una amiga que tomó enseñanzas tántricas, me gustó lo de hacer sagrado el acto sexual, unir sexo y corazón fluídamente. Tú das información en talleres?

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